El presente documento describe los aspectos que fueron de
interés, respecto a la oralidad, sus características, diferencias
y bondades respecto a la expresión escrita, la expresión oral, como hablar en
público, la argumentación científica y la oralidad en las redes sociales.
Algunas características de la oralidad
Ong habla de
la profunda diferencia que se deriva de la formulareidad de la una y de la
carencia de la misma en la otra. Barrera y Fracca (1999) hacen una detallada
descripción de las diferencias entre oralidad y escritura:
La formulareidad:
http://www.google.com.co/url?sa=i&source=images&cd=&cad=rja&uact=8&docid=m1B7EiqjHa_
WTM&tbnid=5Lq4FliZh2-CWM&ved=0CAgQjRw&url=http%3A%2F%2Fblogdepoemas.com
%2Fcomo-redactar-un-poema%2F&ei=LbOXU_HaD6eqsQSskoGABg&psig=
AFQjCNHT7ZT98opY11AYY1Zz0GK8B1afLg&ust=1402537133341323
WTM&tbnid=5Lq4FliZh2-CWM&ved=0CAgQjRw&url=http%3A%2F%2Fblogdepoemas.com
%2Fcomo-redactar-un-poema%2F&ei=LbOXU_HaD6eqsQSskoGABg&psig=
AFQjCNHT7ZT98opY11AYY1Zz0GK8B1afLg&ust=1402537133341323
“La formulareidad es una de las
características más interesantes para quien estudia la función poética o
textual del lenguaje. Se trata de la recurrencia de fórmulas o grupos de
palabras empleadas regularmente en las mismas condiciones métricas para expresar
una idea esencial dada (Parry 1971:272, citado en Ong 1987:32) que le confiere
a la oralidad un carácter más bien circular.
Implica la
no-importancia de la originalidad, éste último un concepto que se comienza a
cultivar en el romanticismo. Anteriormente,
la oralidad había cultivado el uso de fórmulas que se repetían para darle ritmo
al canto y también para ayudar a la memoria.
La fórmula es entonces una repetición que se da en diferentes lugares de
un texto, o en diferentes situaciones.
Ejemplo de fórmula: El
saludo. Al saludar repetimos ciertos segmentos, tales
como hola,
¿qué tal? ¿cómo estás? y
esperamos en la respuesta otros como hola, bien, etc. Estas expresiones se encuentran aisladas o
en grupos de varias de ellas y significan únicamente 'te saludo', no
esperándose encontrar ninguna información referencial en ellas.
La argumentación, otro género común al
lenguaje cotidiano de los adultos es aún más complicado, pues implica también
lo dialógico, sin que necesariamente deban estar dos personas frente a frente.
Una prueba de la elaboración y complejidad que pueden llegar a tener las conversaciones se encuentra en los manuales de cortesía. Ej: Manual de Carreño “Nada hay que revele más claramente la educación de una persona, que su conversación: el tono y las inflexiones de la voz, la manera de pronunciar, la elección de los términos, el juego de la fisonomía, los movimientos del cuerpo, y todas las demás circunstancias físicas y morales que acompañan la enunciación de las ideas...(Carreño, 1999 :174)”.
La Transcripción de la Oralidad.
http://cdn1.anunico-st.com/foto/2013/11/transcripcion
_de_audio_y_o_video_a_texto_cualquier_formato
-5277058f9a8f1bbc18f6bb455.jpg
Transcribir la
oralidad en escritura, el habla oral en habla escrita, es algo que hacemos
naturalmente, porque la traducción de una forma de expresión del pensamiento en
otro se da de forma automática.
Parece obvio que la
escritura tiene todos los elementos necesarios para la transcripción de la
oralidad, signos de puntuación, signos de exclamación, unidades sintácticas
como oraciones y párrafos, además de las palabras que se corresponden, creemos,
las unas a las otras.
Los signos de puntuación de la escritura no equivalen a las pausas de la oralidad. Además, las unidades de la lengua oral distan de ser equivalentes a las unidades de la lengua escrita. Tampoco corresponden los signos de exclamación totalmente a la entonación. Aquellos expresan admiración e interrogación, con lo que apenas se refieren a dos formas de interpretar el sentido de lo "dicho", por una parte; por la otra, admiración y interrogación -referidas a la semántica de la frase- pueden darse, por ejemplo, con diferentes entonaciones en los distintos dialectos del español hablado en América.
La entonación se refiere a la pragmática, es decir, al uso del lenguaje. Una pregunta puede tener - como bien sabemos- el sentido de una orden. Citando el ejemplo más trillado de la Lingüística, ¿me quieres pasar la sal? es una orden indirecta a los demás comensales para que me acerquen el salero (Searle, 1975).
Escritura
y Poder
La escritura
implica poder. Kress (1979) opina que el
analfabetismo estigmatiza y por ello, los analfabetos ocultan su
desconocimiento de la lengua escrita.
Los que poseen el
código de la escritura, en las sociedades en donde subsiste el analfabetismo,
tienen más poder que los que no lo tienen, entre otras cosas porque no tienen
acceso a la información que se transmite por vía escrita. Según Kress, este
uso activo de la lengua escrita -escribirla antes que leerla-
sólamente la tienen los miembros de los grupos socioeconómicos más altos.
La distancia social
que existe entre oralidad y escritura podría entenderse como un tipo de
diglosia entre estas dos formas, de una situación de bilingüismo estable en la
que un mismo grupo comparte dos códigos, uno de los cuales tiene un estatus
sociopolítico inferior; el código alto cumple entonces las funciones de
gobierno, educación, religión, etc. y el bajo queda relegado al hogar, a la
familia y a los amigos.
Referencias Bibliográficas
1. Álvarez, M. Alexandra. Análisis de la oralidad:
una poética del habla cotidiana. Mérida. Extraído el 13, mayo de 2013, de http://elies.rediris.es/elies15/cap12.html
2. Saidiza, Victor. Módulo de Psicología Universidad
Nacional Abierta y a Distancia, Bogotá. 2011.
1. http://ruv.unad.edu.co/index.php/academica/salud-global/1006-programa-no-2-salud-global.



No hay comentarios:
Publicar un comentario